Balance de la ‘Conferencia Internacional de la UE en el Ámbito Jurídico de la Ciberdefensa’

• Las conclusiones alcanzadas tras el evento ayudarán a fomentar el desarrollo jurídico en un ámbito tan complejo y novedoso

Balance de la primera ‘Conferencia Internacional de la Unión Europea en el Ámbito Jurídico de la Çiberdefensa’ en relación a las operaciones militares. Un encuentro en el         que han participado los Mandos Ciber de las diferentes Fuerzas Armadas de la Unión Europea, liderado por el Mando Conjunto del Ciberespacio (MCCE). Esta conferencia se encuadra dentro del programa de actividades previsto para la Presidencia Española de la Unión Europea (PEUE),

Desde el MCCE se subrayan las siguientes conclusiones tras las diferentes posturas expuestas durante esta reunión internacional:

• La promoción de posturas comunes, así como contramedidas coordinadas, debe considerarse la herramienta más potente a la hora de establecer un marco útil para disuadir agentes maliciosos y estar preparados para responder de forma efectiva a este tipo de amenazas.
• El uso de un lenguaje común, así como acotar una terminología concreta alrededor de las actividades maliciosas, es necesario para cumplir el punto anterior.
• La credibilidad es una clave importante para legitimar posturas comunes y, de esta forma, el acuerdo entre todos los miembros ha de ser una obligación constante.
• La concienciación y las buenas prácticas suponen el núcleo de cualquier medida posterior. El nivel más elemental, incluso el individuo, puede evitar que cualquier situación escale.
• Definir el rol y las competencias de los estados resulta muy importante, dado el papel imprescindible que estos juegan en este ámbito.
• Los intereses nacionales han de ser tenidos en cuenta. A cada paso hacia adelante, las diferentes naciones que participen en un acuerdo habrán de manifestar su conformidad tanto respecto a la UE como a sus propios intereses.
• La empresa privada debe ser responsable de garantizar la seguridad de la infraestructura crítica que le compete, además de ser proactiva y capaz de proteger los activos que dependan de su actividad directa.
• No existen obstáculos legales para desarrollar contramedidas colectivas como forma de enfrentar actividades maliciosas en el ciberespacio.
• Compartir información es clave para proteger, disuadir y prevenir ataques cibernéticos, por lo que es necesario fomentar el intercambio de inteligencia sobre amenazas entre aliados y comunidades de confianza.

Estas conclusiones marcan una serie de hitos a conseguir. Cada nación tiene sus propios objetivos y su propia perspectiva e idiosincrasia por lo que necesario admitir esta realidad y ponerla en valor para garantizar un desarrollo provechoso de cualquier iniciativa jurídica en torno a los problemas que acarrea la actividad ciber.

En este aspecto, durante esta Conferencia Internacional los objetivos se han alcanzado con aprovechamiento y han situado a España en el centro del aspecto legal y jurídico a nivel europeo.