El Mando Conjunto del Ciberespacio lidera al equipo español en el ejercicio `Locked Shield 2022´

•  El equipo está formado por militares nacionales y extranjeros y con civiles tanto del sector público como del privado

El Mando Conjunto del Ciberespacio(MCCE) está coordinando al equipo español que participa en el ejercicio `Locked Shield 22´. El miércoles 20 comenzó este ejercicio técnico que se prolonga durante tres días y que consiste en el enfrentamiento en el ciberespacio de dos grupos.

El ciberejercicio `Locked Shields´ está considerado uno de los principales ejercicios de ciberdefensa a nivel mundial. Se organiza anualmente por el Centro de Excelencia de Ciberdefensa (CCD CoE) de la OTAN situado en Tallin (Estonia) y está orientado al adiestramiento de equipos de respuesta ante incidentes (CERT: Computer Emergency Response Team, es decir Equipos de Reacción Rápida en respuesta a ciberincidentes), también conocidos como CSIRT en Europa, que se despliegan ante unas redes desconocidas con poco tiempo para familiarizarse con ellas.

España, socio fundador del CDC COE y que forma parte de su Comité de Dirección (Steering Committee), lleva participando en el ejercicio desde 2010. Nuestro país participa en esta edición de 2022 con un equipo mixto de civiles y militares, completado con representantes del Mando de Ciberdefensa de Brasil. Liderados por el MCCE, además del Ejército de Tierra, Aire y Armada, el equipo nacional lo integra personal de la Policía Nacional y la Guardia Civil. En la parte civil, además de técnicos del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) o del Centro Criptológico Nacional (CCN), se cuenta con profesionales de empresas tecnológicas, como Telefónica, Siemens o Indra y con personal del mundo universitario.

El concepto del ejercicio es “lucha” en tiempo real de dos equipos técnicos: uno de defensa (Blue Team –BT) y otro de atacantes (Red Team –RT). El BT es una alianza de países que ayudan a un país ficticio, miembro de esa alianza, a defender sus sistemas informáticos, de los ciberataques perpetrados por el RT de manera continuada.

Es una competición donde la misión del Blue Team es comprender y evaluar la situación, mantener la disponibilidad, la confidencialidad y la integridad de los servicios en las redes simuladas que han sufrido ciberataques.

Para aumentar la conciencia y las competencias en todos los niveles, el ejercicio incluye desafíos forenses, legales, mediáticos y de comunicación estratégica, entre otros.

En el ejercicio trabajan más de 2000 participantes de 32 países, que divididos en 24 equipos (BT) con una media de 50 expertos por cada uno, defienden los sistemas de una nación contra los ataques de un grupo de hackers.

El equipo nacional está formado por unas 60 personas, de las que una veintena pertenece al MCCE. Sin la colaboración del personal de las Fuerzas Armadas y de los otros organismos y empresas, habría sido muy difícil participar en este ejercicio.