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Reportero del EMAD

Soldado Abraham Trigo: fuerza y solidaridad

Además de sus títulos en los campeonatos de España y del mundo en Salvamento y Socorrismo Acuático, el soldado ha destacado por su participación en diferentes acciones solidarias.
6 de julio de 2018

Además de sus títulos en los campeonatos de España y del mundo en Salvamento y Socorrismo Acuático, el soldado ha destacado por su participación en diferentes acciones solidarias.

Una breve búsqueda en internet nos muestra las múltiples hazañas del soldado Abraham Trigo, miembro del equipo de salvamento del primer Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM I). Abraham ha ganado diez años consecutivos el campeonato de España de Salvamento y Socorrismo Acuático, ha sido dos veces subcampeón del mundo de esta disciplina, y es referente y amigo de los mejores rescatadores de España, pero una gran hazaña destaca por encima de todas: su solidaridad.

Entre los años 2012 y 2014, representando a la Unidad Militar de Emergencias, participó en el proyecto ‘Mediterranean Challenge’ cubriendo a nado con otros tres compañeros de aventura, Javier del Cerro, Raúl del Cerro y Chema López, los 200 kilómetros que separan Menorca de Barcelona. En ambas ediciones consiguieron registro en el libro Guinness. Cuentan, como anécdota simpática de la proeza, que tal es su calidad como nadadores, que llegaron a las orillas de Barcelona antes que los medios de comunicación, y tuvieron que tirarse de nuevo al agua para que se pudiese grabar su llegada.

Se trataba de una iniciativa que pretendía recaudar fondos en favor de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) y rendir un homenaje a todos aquellos que día a día luchan contra esta enfermedad. Este proyecto solidario consiguió algo sin precedentes: cerca de un millón de euros que fueron empleados en la construcción de una planta de un hospital madrileño en favor de la lucha contra el cáncer.

Pero paradojas de la vida, ahora es Abraham el que necesita ayuda, ya que desde hace un año está sufriendo una grave enfermedad. Cuando sus compañeros lo supimos, empezamos a pensar cómo ayudar a alguien que tanto había hecho por los demás. Y Abraham nos volvió a sorprender. Dejó muy claro desde el primer momento que lo único que quería era difundir la importancia de la donación de médula. De nuevo un gesto altruista: no pidió nada para sí mismo, sino para todos los que pudieran beneficiarse de esta acción que tantas vidas salva en el mundo.

Ayer un grupo de doctores y enfermeros del Centro de Transfusión de la Comunidad de Madrid, a los que agradecemos su gran disponibilidad, vino a la Base Aérea de Torrejón a explicar a un gran número de soldados de la UME, el compromiso y la solidaridad que supone incorporarse al banco internacional de datos de donantes de médula, que ya cuenta con más de 30 millones de voluntarios, y que cada día salva miles de vidas en todo el mundo. Una pequeña muestra de sangre y un gran compromiso, tal como reza el himno de nuestra UME: “guardar siempre la vida, es nuestro ideal”, nos dan la oportunidad de salvar una vida anónima como es nuestro deseo en todas nuestras intervenciones en emergencias.

En las próximas semanas se hará extensiva esta iniciativa, “proyecto UMEdula”, a las unidades de la UME que se encuentran fuera de Torrejón, con el fin de cumplir con el deseo de Abraham: conseguir el mayor número de donantes de médula posibles, y con ello, contribuir a mentalizar a la sociedad de esta necesidad.

Nuestro compañero Abraham ya demostró poseer una solidaridad solamente comparable a sus cualidades físicas excepcionales, y ahora que es él quien tiene la necesidad, vuelve a hacerlo impulsando una iniciativa en beneficio de miles de personas.

Abraham, te mandamos todas nuestras fuerzas y te deseamos una pronta recuperación. ¡Estamos contigo!

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